Conny dijo:
Cuando no tienes nada más que hacer, cuando has perdido a los seres más importantes de tu vida,cuando no tienes un oficio del cual ocuparte, en la máxima tristeza o desesperación o en la insensibilidad del amor, finalmente, en la sensación de carencia de sentido, hay algo que muchas personas en muchas ocasiones no se detienen a considerar, siendo, que pueden hallar en ello, la respuesta que tanto urge.
El pensamiento de la humanidad es utilitarista, y no lo digo con desprecio por lo feo que suena,de hecho, es ese pensamiento el que, de cierta manera, permite el desarrollo de las sociedades en el sentido material, sin embargo, crea un nudo en el desarrollo espirirtual de la persona.
He vivido en mis carnes el sufrimiento de sentirse inútil e innecesario y sé que muchos lo han vivido también, pero en esos casos siempre cuento con mi inquieta mentecita que me lleva a mil reflexiones viajeras y que me ayudan finalmente a salir del molesto trance. Ninguna persona vale por lo que hace.Incluso, creo que ninguna persona vale tampoco por lo que tiene,ni por su utilidad ni su necesaridad, e incluso, siendo aún más extrema (y sincera), tampoco vale por lo que siente ni por el sentido de su vida.
Sea del modo que sea y para lo que sea, todos estamos aquí(entiendase, en el mundo) de manera diferente en todo sentido,y el solo hecho de vivir justifica el derecho a vivir. De cierta manera, todolo que nos ocurre en la vida son accidentes,(tendríamso algo así como: vivir es lo macro,y todo lo que ocurra en ese vivir es lo micro, lo accidental), pero estoy conciente de que esos accidentes son los que dan forma a la vida, la modifican y la perfeccionan, de modo que el asunto tampoco se trata de ignorar esos accidentes y evitarlos (aunque hay que reconocer que es el medio más cómodo para alejar problemas).Lo verdaderamente importante es reflexionar acerca de si es alguno hecho de tu vida, verdaderamente importante como para desvalorizarte y desear no existir. Con esto no estoy dando un no rotundo, sé bien que el más mínimo hecho puede cambiar la vida de una manera tan significativa que se convierte en un trauma, sin embargo, creo también, que por difícil que sea, todo sufrimiento (y de hecho cuaquier cosa) puede ser evitada. Porque el ser humano posee libre albedrío. Vasta mentalizarse, pensar y ponerse a disposición para cambiar incluso, un destino que es supuestamente incambiable. Pero las personas son tan reacias a creerlo y si lo creen son tan negativas (a veces enfurece darse cuenta de que hay personas que parecen disfrutar sufrir como para llamar la atención) que se limitan a ellas mismas en su terquedad y en lo incorrecto (y por cierto, ¿Soy yo acaso la que sabe lo que es correcto e incorrecto?). El ser humano tiene las herramientas para lograr lo que desee,pero a veces, esas mismas herramientas están mal empleadas.
En vez, de tomar desiciones tan profundas o de buscar razones de vida en todo, las personas deberían recordar por un momento, que están vivas, que tienen una vida y que el hehco de tener vida, les otorga un valor que es igual a todo ser vivo,y es ese valor, la única razón que vasta para merecer vivir.
Las sociedades son muchas, los pensamientos y corrientes filosóficas, también,muchos y variados han sido los oficios a lo largo de al historia de la humanidad, y todas esas variedades nos indican que la verdad no es una y exacta, por lo tanto, no hay pueblo que pueda juzgar ni ser juzgado, por mucho que intimide la aceptación social.
Que todo se viva como una gran aventura, que a algunas cosas les un otorguemos valor especial para sentirnos extasiados, y que a veces nos sometamos para pasar un buen rato, pero que jamás olvidemos que por sobre cualquier valor, somos seres vivos, y que si vivimos es por algo y ese ago tienen validez.
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